Y te amé
como colibrí al cáliz
fuiste mi orfebre
al moldear mi corazón
hice de tu nombre una lira
entonada por alondras
desde aquella Primavera
Viajé ligado a tus manos
adherido a la seda de tu piel
aferrado a tu alma intensa
en tu amor final desesperado
y con mis quiebras tan humanas
no existió instante sin amarte
ni indolencia interna en las distancias
Te prodigué mis versos
siempre tuyos
aguardaban sin saber de tu existir
y sobre lunas pintaba tu mirar ignoto
pero un fuego ajeno de perversidad
laceró nuestro vivir
y hoy no te puedo sujetar
La llovizna en el camino
es compañera de mis lágrimas
añorando las sonrisas de diciembre
la pureza y el brillo de tus ojos
mas el dolor y soledad
suprimieron aquella felicidad
oh mi dulce amor que ya volaste
Adoro aquella tarde eternamente
cuando tu rostro alumbrado por el sol
me mostró la vida encendida de los dos
todo ello es mi razón …
ADAGIO CANTABILE