El solfeo del ave a un amor
germinado con sincera valentía
se amordazó en persecución sangrante
qué vano sacrificio camino hacia el umbral
¡Cómo fue posible derruirlo!
Fuimos más allá del sempiterno
más allá de crestas imaginables sólo en sueños
más allá del piélago en su lobreguez
aún así el trinar calmaba la desesperanza
No se ausculta, sólo somos espectros
Acáso existe vuelta al comienzo
ser como fuimos
sentir como sentimos
vivir como vivimos
No hay panacea tardía
Inhalo agónico nuestra ausencia
y exhalo estrechando la soledad impertérrita
pues no sobreviene el recuerdo del recuerdo
se cobija de gélido manto
La faz de lo que fue
Atemporal en afonía aguda
busco nuestras almas
tu sonrisa untada con mi devoción
pero veo sólo la tumba
Donde silentes yacemos
No existe sacrificio,
el pájaro ha volado.
THE SCIENTIST - COLD PLAY